Para hacer la visita es obligatorio anotarse con antelación por está página web, llenar un montón de datos: nombre, apellido, documento, dirección, etc...y comparecer 20 minutos antes del horario agendado. Eso hicimos y el domingo partimos con mi familia y mi novio hacia Balcarce 50.

Ya desde afuera se respira monumentalidad. Es muy grande y el color ayuda a que no pase desaprecibida. Por qué rosa? Aparentemente era un color muy utilizado en su época y sale de la mezcla de la cal (de color blanco)  y sangre bovina. Qué impresión, no?
Caminamos por el entorno hasta que se abrieron los portones para las visitas de nuestra hora. Presentamos documentos e ingresamos en medio a varios turistas y locales. Nos acompañó una guía muy copada que nos contó la historia de la casa y de sus salas y patios.  En éste link tienen una muy buena reseña como ¨teaser¨ de la visita!
Adentro visitamos la sala de los héroes latino americanos, los patios menores, el salón de Evita y su comedor, el pasillo de personajes ilustres, el despacho presidencial, el salón de los bustos, el lujoso salón blanco donde asumen los presidentes, el famoso balcón y el Patio de las Palmeras.
El Patio de las Palmeras me robó el corazón. Fue construido en la época en que vivían ahí los Virreyes y por eso es tan majestuoso: palmeras, jardines, pisos super trabajados, filigranas y ventanas con vitrales. Todo una gran obra de arte! Lo intenté capturar en fotos los mejor que pude pero les aseguro que hay que verlo con los propios ojos.

Acá podemos observar el patio de las Palmeras y mi talento para hablar justo en el momento de la foto  :/

Los pisos solos ya son obras de arte

Del salón de Evita impresiona muchísimo la mesa gigante de madera pero a mí lo que más me gustó fue el techo: colorido, alegre, lleno de detalles y con arañas monumentales. Si van, no dejen de mirar para arriba. El salón blanco también merece atención pero confieso que me decepcionó un poco saber que las ventanas y el balconcito de arriba son falsos... Soy arquitecta y esas escenografías en la arquitectura no me copan mucho.

El Salón Blanco, uno de los más emblemático de la Casa Rosada

El techo maravilloso antes de entrar al Salón de Evita

El techo del comedor contiguo al Salón de Evita es para quedarse de boca abierta!

Lo que me resultó divertido fue asomarse por el balcón y ver de arriba la Plaza de Mayo. Imposible no imaginarse a las multitudes en las manifestaciones y festejos. Desde aquí se asomó el Papa, la selección argentina que ganó el mundial, varios presidentes... En fin, este balcón fue testigo de un sinnúmero de marcos en nuestra historia y es lindo poder verlo desde ese punto de vista.

La Plaza de Mayo desde el balcón!

La visita en general estuvo buenísima. Está muy bien armada y me encantó conocer este edificio por dentro después de verlo tantas veces por fuera. Si le pudiera criticar algo, sería la falta de mantenimiento de muchas de las áreas. Si bien leí que se invirtió y se sigue invirtiendo mucha plata para la restauración, aún queda mucho trabajo por hacer. Es una obra hermosa y patrimonio de nuestro país por lo que debemos preservarlo en las mejores condiciones para las futuras generaciones. Esperamos que sigan trabajando para ello!

Si les gustó la reseña no dejen de inscribirse en las visitas guiadas del próximo finde en este link: https://visitas.casarosada.gob.ar/ déjenos sus comentarios y sugerencias (nos encantan!) y déjenos su like nuestra página de facebook para acompañarnos en nuestras próximas publicaciones!

Por último no me podría ir sin subir la típica foto de turista en Buenos Aires :

Mechi